La situación para la industria del entretenimiento no ha sido nada sencilla. A pesar de que el proceso de reapertura ha comenzado en algunas regiones del país, marcas como Cinemex y Cinépolis han anunciado pérdidas considerables.
A finales del mes pasado, Cinépolis revelaba qué tan duro habría el golpe de la pandemia a su negocio, valuado en 83.5 millones de boletos. O lo que es lo mismo, cuatro mil 175 millones de pesos (mdp). De acuerdo con El Universal, para su rival Cinemex las cosas no serían diferentes. Las salas color rojo “solo” dejaron de percibir 35 millones de entradas. Es decir, el equivalente a mil 750 mdp en el transcurso de los últimos pocos meses.
En entrevista con El Universal, Francisco Eguren, director de Programación y Comercial de Cinemex, indicaba que esta cifra fue “hueco súper importante” para la compañía. No solo eso, sino que dio un par de perspectivas muy negativas en caso de no regresar a operaciones lo antes posible. Para que su empresa continúe operando, deberían abrir el 100 por ciento de sus complejos para julio. Si se prolongan las medidas, sería crucial el cierre de salas y despidos.
Este último escenario no sólo se ha convertido en una realidad para Cinemex, la pena es compartida por Cinépolis ya que ambas firmas se verán obligadas a cerrar de manera definitiva algunos de sus complejos a lo largo y ancho del país.
Cuando menos así lo indicaron desde El Sol de la Laguna, medio que afirma que fue la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica (Canacine) el organismo que confirmó el cierre permanente de nueve “capitales” de Cinépolis y cinco de Cinemex.
De manera puntual se espera que estos cierres se den en las regiones de Saltillo, Durango, Nuevo León, Estado de México, Jalisco, Ciudad de México, Tamaulipas y Guanajuato.
Es importante mencionar que según las estimaciones del medio citado, se calcula que en cada complejo laboral en promedio 80 personas, con lo que el cierre de 14 establecimientos de Cinépolis y Cinemex en conjunto, se perderían mil 120 empleos.
De la misma manera que sucede con la mayoría de las marcas que vieron afectadas sus operaciones por la emergencia sanitaria, para las cadenas de cine resulta fundamental llevar por buen puerto el proceso de reactivación, ya que de esto depende recuperar con velocidad y eficiencia sus actividades en medio de un escenario de pérdidas.