México logrará cero contagios de COVID-19hasta octubre de 2022, de acuerdo con el más reciente reporte delModelo Evolutivo COVID-19, publicado este jueves por académicos de laUniversidad Autónoma Metropolitana(UAM).
El Departamento de Economía de la Unidad Iztapalapa de la UAM publica este reporte periódicamente, e indica que es muy preciso al ubicar la fecha de desaparición del SARS-CoV-2, responsable de la enfermedad del COVID-19 en la primera semana de octubre de ese año.
Una vez asimilada la nueva ola de infecciones y el retraso en la aplicación de las vacunas, se efectuó el cálculo estadístico con datos desde el primer caso, el 28 de febrero de 2020, hasta el 23 de enero último, indicaron los doctores Roberto Gutiérrez Rodríguez, jefe del Departamento de Economía de la Unidad Iztapalapa, y Marco Antonio Pérez Méndez, investigador.
El ritmo de expansión futura se ajustará a la trayectoria de una curva Gompertz y, sobre esa base, “el punto máximo, en que por fin se llegaría a cero contagios adicionales, sería en la primera semana de octubre de 2022”, con un acumulado de tres millones 278 mil 208 personas, señalaron los especialistas de la UAM.
El nivel de inflexión, esto es, cuando se registre la tasa máxima de crecimiento de los enfermos, previo al inicio del descenso –que en los modelos originales se había considerado entre fines de abril y principios de mayo de 2020 por la UNAM y la Secretaría de Salud, entre otras, y se fue posponiendo, hasta que se decidió no hacer más previsiones– “se extiende hasta alrededor del día 400: a principios de abril de 2021, de acuerdo con nuestros resultados”.
Si bien las gráficas de expansión que presenta cada noche la Secretaría de Salud muestran el inicio de un descenso, “algo que hemos aprendido de este fenómeno es que los cambios de tendencia locales con frecuencia se confunden con cambios definitivos”, señalan los expertos.
Respecto del número de fallecimientos aclaran que dada la calidad de la información, objeto de múltiples rectificaciones por diversos investigadores, no es posible operar el modelo Gompertz con las cifras oficiales, por lo que sugieren trabajar con algo que es de sobra conocido: la tasa de letalidad.
Explicaron que con el coeficiente acumulado fallecimientos/contagios que en general ha tendido a bajar rápido en el resto de países, “pero lo ha hecho a un ritmo pasmosamente lento en el nuestro”, al pasar de 11 por ciento el 30 de abril de 2020, a 8.5 por ciento en la actualidad, “con mucho el más alto del mundo”, afirmaron.
Con ese descenso, que en nueve meses ha sido de 0.278 puntos porcentuales por mes, pero que se ha ido moderando con el tiempo y que podría reducirse un tercio más para febrero 2021-octubre 2022, la tasa de letalidad acumulada se situaría en alrededor de 6.8 por ciento.
Esto implica que de los tres millones 278 mil 208 enfermos de COVID-19 hasta principios de agosto de 2022 –cuando se prevé lleguen los contagios a su límite superior– el número de fallecidos será de 222 mil 918, por lo que “aún faltarían 73 mil 834 más, respecto del dato del 23 de enero de 2021.
En opinión de los expertos de la UAM, la estrategia con que México enfrenta la pandemia “demanda más que nunca un golpe de timón, sobre todo porque ésta no existe, aseveran múltiples observadores, académicos y organismos especializados nacionales e internacionales” que observan movimientos casuísticos, con todas las esperanzas puestas en la aplicación de las vacunas.