Este pasado domingo 27 de enero, en conferencia de prensa la Jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum y el director de la Agencia Digital de Innovación Pública, José Merino anunciaron que para realizar cualquier trámite, los habitantes de Ciudad de México ya no tendrán que renovar su acta de nacimiento cada tres meses.
Esto al considerar que no existe justificación legal o razón práctica para mantener este requisito. Ambos funcionarios especificaron que el acta de nacimiento solo pierde su vigencia con la muerte del interesado o cuando este solicita un cambio de nombre o de sexo.
De acuerdo con información recabada de varias fuentes, este requisito, se uso por las autoridades capitalinas para cuestiones económicas, se calcula que el trámite permitía la recaudación de 11.6 millones de pesos, con casi 700 trámites diarios, lo que representa una pérdida marginal de recursos y un beneficio para los ciudadanos.
En el Registro de Trámites y Servicios de la ciudad aproximadamente existen 111 trámites que requieren una copia certificada del acta de nacimiento. De estos, 74 corresponden a diligencias en las alcaldías y 37 se realizan en otras dependencias del gobierno local.
La medida entrará en vigor a partir de esta semana, una vez que se firme una circular, y todos los funcionarios lo tendrán que acatar; de no hacerlo, dijo Sheinbaum, recibirán una sanción administrativa.