Justo en el número 17 de la calle Justo Sierra, en el Centro Histórico de la CDMX, expertos del Programa de Arqueología Urbana (PAU) del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), hallaron restos de una vivienda construida poco tiempo después de la caída de Tenochtitlán a manos de Hernán Cortés.
En un comunicado emitido por este Instituto, se indicó que ya comenzaron los trabajos de salvamento arqueológico y se han localizado los vestigios de una plataforma que corría detrás del Templo Mayor, así como de una casa del periodo virreinal temprano.
El responsable del PAU, Raúl Barrera Rodríguez, indicó que hay indicios de la existencia de un espacio abierto o plaza en esa área del Recinto Sagrado de Tenochtitlán y que la plataforma posiblemente pertenece a la que corre detrás del Templo Mayor, continúe bajo la calle Justo Sierra e incluso del Antiguo Colegio de San Ildefonso.
En las exploraciones se halló una escalinata en buen estado, adosada a un muro de un metro de anchura,roto y de aristas ochavadas, la cual servía de acceso lateral a la vivienda.
A los arqueólogos les sorprendió la presencia de vestigios arquitectónicos correspondientes a una casa del periodo virreinal temprano que fue realizada con materiales que fueron utilizados tras la destrucción de pisos mexicas para los nuevos hogares de los aliados de Cortés.
Finalmente, consideran que los indígenas eran retornados al área que ocupó el Recinto Sagrado para que sirvieran de mano de obra, bajo la dirección de los españoles.