Tras la decisión de irse a paro por la falta de pagos de bonos, así como informar sobre un supuesto acoso en contra de una compañera, alrededor de 60 elementos policíacos durmieron afuera de la comandancia de seguridad pública de ese municipio.
Los afectados solicitan que se les otorgue el aumento salarial, que obliga la ley para este año, así como una explicación por el descuento en su aguinaldo del año pasado, asimismo piden el mantenimiento de las patrullas que usan y el apoyo que obliga la ley a los elementos que han cumplido los cinco años de servicio.
A todas estas peticiones se les suman el caso del supuesto acoso en contra de una de sus compañeras por parte del comisario así como el despido injustificado de un elemento, quien denunció la situación que vivía la policía.
«No nos dan uniformes, primas vacacionales, permiten el acoso a las compañeras, junto con el señor comisario, despiden injustificadamente, nos trata de lo peor junto con su cabildo. Solo queremos soluciones a lo que se le pide, es para mejorar seguridad pública solo eso», agregó el policía a nombre de el resto de uniformados.
Hasta el momento el paro de labores de los policías continúa pese a que el municipio, al igual que el resto de la entidad, se encuentran en contingencia sanitaria por el COVID-19 sin embargo el ayuntamiento decidió solicitar la ayuda de Guardia Nacional para realizar las labores de seguridad pública.